Ads 468x60px

sábado, 18 de enero de 2014

Tips para ejercitar el cuerpo durante el embarazo


Antes de realizar cualquier ejercicio se debe consultar con un médico y cerciorarse que actividad física se pueda realizar y que no sean peligrosas tanto para la madre como el bebé. Estos son algunos consejos para ponerlos en práctica:


1. Evita completamente los deportes peligrosos:

Evita los deportes de contacto, así como las actividades en las que se pueda perder el equilibrio, como cabalgar o montar en bicicleta. Recuerde que durante el embarazo el cuerpo produce la hormona relaxina, cuya función es dar mayor flexibilidad y elasticidad a las articulaciones para que el parto sea más ligero. El problema es que esta hormona afloja todos los ligamentos y coyunturas del cuerpo, haciendo que estés más susceptible a torceduras y lesiones si se llega a caer.

2. Realiza ejercicios de calentamiento antes de empezar:

Los ejercicios de calentamiento sirven para preparar los músculos y articulaciones para la actividad física. También para aumentar lentamente la frecuencia cardiaca. El precalentamiento evita lastimarse los músculos y ligamentos, además de sentir más dolores y agujetas al día siguiente.

3. Toma bastante agua:

Se debe tomar agua antes, durante y después de hacer ejercicio. Si no se hace, puede provocar contracciones, aumentar la temperatura, deshidratación y muchas veces alcanzado niveles que pueden ser peligrosos para la madre y el bebé.

4. No hagas ejercicio acostada boca arriba:

Después del primer trimestre, se debe evitar acostarse de espaldas. Esta posición presiona una de las principales venas del cuerpo, la vena cava, haciendo que disminuya el flujo sanguíneo al cerebro y al útero, presentando que la mujer tenga mareos, falta de aire o náuseas. Algunas embarazadas se sienten cómodas en esta posición, pero esto no significa que no haya sido afectado el flujo de sangre hacia el útero. Lo aconsejable es colocar un cojín o una almohada bajo la cadera o nalga derecha y descansando en una posición casi horizontal sin comprimir la vena cava.

5. Mantente en movimiento:

Si se permanece de pie sin moverse por largos periodos de tiempo, el flujo sanguíneo al útero podría disminuir y la sangre podría acumularse en las piernas, haciendo que se marees. Se aconseja mantenerse en constante movimiento, cambiando frecuentemente de posición o caminando sin moverte del sitio.

6. No exageres la actividad:

No hagas ejercicio hasta que estés completamente exhausta. Recuerda la siguiente regla: si no puedes hablar con facilidad mientras haces ejercicio, disminuye el ritmo. Lo importante es que estés atenta a las señales de tu cuerpo. Si algo te duele, lo mejor que puedes hacer es parar.

7. No te sobrecalientes:

Evita calentarte demasiado, sobre todo durante el primer trimestre, que es cuando se están desarrollando los principales órganos del bebé. Aunque no hay pruebas científicas de que esto sea peligroso para los bebés humanos, algunos estudios con animales parecen indicar que el sobrecalentamiento puede causar malformaciones congénitas.
Para enfriar rápidamente el cuerpo, deja de hacer ejercicio, quítate algo de ropa y cambia de ambiente, ya sea buscando una habitación con aire acondicionado o dándose una ducha fría. También es muy importante tomar bastante líquidos.

8. Levántate lentamente:

A medida que crece el abdomen el centro de gravedad cambia, por lo cual siempre que se cambie de posición se debe hacerlo con cuidado. Si te levantas demasiado rápido te puedes marear, o perder el equilibrio y caerte.

9. Enfríate y estírate al final:

Cuando termines de hacer ejercicio disminuye poco a poco el ritmo, caminando sin moverte del sitio por algunos minutos y luego estirándote. La frecuencia cardiaca aumenta durante el embarazo y puede tardar hasta 15 minutos en regresar al nivel de descanso después de una actividad física.

10. Habitúate a hacer ejercicio:

Puedes realizar una actividad física o una caminata diaria por tiempos cortos. 

Redacción Tideti.com
 
 
Blogger Templates